Descorchar y beber a sorbos

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jueves, 27 de mayo de 2010

FUSE, HENRI ABELÉ Y MIL AMIGOS


















































Y llegó otro gran día. Anoche se preparó...Mmmmmm, bueno, no seré modesta.... Anoche preparé una de las grandes fiestas estivales en Madrid. La fiesta de presentación de una nueva temporada de verano en las terrazas de Fuse Puerta América, pero una fiesta dedicada sobre todo a periodistas, agencias de comunicación y otros líderes de opinión. Desde las 9 de la noche, la planta 13 del poco discreto hotel Puerta América se empezó a llenar de gente dispuesta a pasarlo bien. Mucho champagne, Henri Abelé en esta ocasión, que quiso ser parte protagonista y anfitriona de la noche. Y mucho gin tonic, preparado con la nueva ginebra Gin Mare, distribuida por Global Premium, y en mi opinión, mucho más apetecible que su anterior primer espada, Gvine, que me recuerda a mi propio perfume, Anaïs Anaïs, pero claro, yo prefiero ponerlo en la piel que en el estómago. Si Gvine vestía de verde, Gin Mare lo hace de azul. Importante que pregunten por ella los amantes de esta bebida pura, que la prueben y que se dejen seducir por sus notas nobles.

Pero bueno, yo estaba hablando de una fiesta que se alargó hasta bien entrada la noche, y donde no paró de brotar bebida y también comida, mucha comida. Y lo mejor, recuperar el abrazo de personas a las que hacía tiempo que no veía... Javier (mi tito Javier); Puebla; José Carlos; Teresa (suerte en Roma)...

Y hoy, pues más fiesta, para variar... Pero esta vez no irá de champancín (aunque alguno caerá, siendo la fiesta en el Cielo del Hotel Urban, raro sería que no fuera así estando Súper Patón al frente), esta vez se homenajea la nueva línea de vinos de Somontano de Bodegas Pirineos. De su Mesache blanco ya he hablado alguna vez.

Y el fin de semana a descansar... con papi que ya toca...

Gracias a Fuse Puerta América por su excelente organización, especialmente a Isaac... Otro Forcada que se supera día a día.

Gracias a todos los que decidísteis pasar parte de vuetro tiempo a mi lado.
Felicidades a Laura por ayudar a que el mundo siga adelante.


















































domingo, 23 de mayo de 2010

LAS CALDAS, PARAISO EN VERDE Y AGUA











Sospecho que hoy mi blog va a provocar más de una envidia. Voy a hablar de un lugar del que acabo de regresar: Asturias. ¿El motivo? Una visita a Las Caldas Villa Termal, un paraíso ubicado a tan sólo 7km. de Oviedo. Hotel, balneario, tratamientos, entorno natural y una gastronomía excelente asesorada por la mano experta del chef Luis Alberto (Casa Fermín). El maitre del restaurnte Viator, Manuel, es un ejemplo de servicio impecable.


Tres noches y dos días completos fueron suficiente para volver a Madrid 4 años más joven (lástima que nada más llegar al km. 20 de la A-6 vuelvas a recuperarlos, ¡qué caravanón!. El primer día, Valentín y yo (hay que ir en pareja, si no, no vale) disfrutamos de un tratamiento relajante con baño de burbujas, cromoterapia y aromaterapia (30 min.), que nos preparaba para el posterior peeling de cuerpo entero con aceite tibio de rosa mosqueta y sales de rosa mosqueta micronizada (por delante y por detrás), peeling y limpieza de rostro y masaje, de nuevo con aceite de rosa mosqueta tibio por todo el cuerpo y cara, (también por delante y por detrás), con música relajante y toallas calientes (otras 2 horas). Fantásticas las manos de Yaiza.


Al día siguiente, Sala de las Columnas,,, Media hora en una piscina romana rodeada de columnas y con una vidriera que refleba y alternaba intensos colores, Carusso de fondo; luego baño turco, jacuzzi y broche final con oxigenoterapia. (1 hora y media)

Además de disfrutar de una habitación casi tan grande como mi casa (75m2), del descanso y de un trato amabilísimo (de verdad, creo que nunca han sido tan amables conmigo en un hotel o restaurante); también nos pegamos un saltito a Casa Fermín, en Oviedo,... Donde estiramos nuestros estómagos hasta el infinito... Atención al menú... Anchoas con A fuega el pitu (queso blanco asturiano de textura harinosa y toque amargo, también lo hay con pimentón); Salmón marinado sobre red de yogur; Cigarritos de morcilla;Coca de bacalao con tapenade; Huevo confitado a baja temperatura con carpaccio de cigala, cordón de crema de cebolla y chips azabache; Pulpo con ajetes y crema fina de patata; Manitas deshuesadas con cigala en velo de panceta; Merluza con salsa avilina (a base de cebolla, típica de Astur); Pichón en tres texturas y Helado de Chocolate con Brownie de chocolate y sopa de chocolate blanco y naranja. Para beber, un blanco de Rioja (Allende) y champancín (Moët). No he podido comentar los platos uno a uno porque todos eran perfectos... De las mejores comidas disfrutadas.

Animo, incito y casi obligaría a los amantes del buen comer a visitar Casa Fermín.

¿Tenía razón?¿He levantado envidias? Pues todo está ahí, solo hay que ahorrar un poquito y hala, a disfrutar de este paraíso en verde y agua.

Gracias a Yaiza, de nuevo, a Wenceslao (Balneario Cadas Villa Termal y a Alexia (Casa Fermín)

Muchas, muchas gracias a Manuel, a Fernando (Dtor. del Hotel), a Luis Alberto (Casa Fermín) y sobre todo a Félix (dtor. del Complejo)


E infinitas gracias a Alicia por descubrirme tal placer....
P.D. Ah niñas! No olvidés sacar una foto a vuestro chico con la braquita tanga que le dan para la sesión de masajes... No tiene desperdicio... Podéis jugar con ella al chantaje ideal...




lunes, 17 de mayo de 2010

SUMMER TIME EN PUERTA DE AMÉRICA. 8 TAPAS E INFINITOS CÓCTELES EN FUSE MARMO BAR
















Llega una nueva temporada de verano en Fuse Puerta América y todos sus espacios empiezan a funcionar a tope. Este año, una de sus apuestas más novedosas e interesantes se lleva a cabo en Fuse Marmo Bar. A partir de las 19 horas, Fuse Marmo Bar adopta un concepto más Gastrobar... El chef José Luis Estevan, del que poco se oye hablar últimamente (y es una lástima, ya que es una de las mejores apuestas culinarias de Madrid) y Victor García de Haro, a quien le ocurre todo lo contrario (le sobra orquesta, no para de hacer ruido... Millésime, Madrid Fusión, Concursos Bar tenders, exhibiciones, etc...), han creado a partir de la idea de uno de los directores de Fuse, Sena Pallero, una de las mejores ofertas gastronómicas y de coctelería que se pueden encontrar ahora en los, insisto, denominados gastrobares de nuestra indómita capital.

Atención, 8 tapas saladas y 2 dulces; 10 cócteles que armonizan con esas tapas... Gazpacho con Pisco de pepino (maridaje perfecto y refrescante); Sardinas suavemente marinadas con asadillo y papaya con una combinación de sake, lima y frutas rojas(suavísismos y limpísimos los filetitos de sardina); Tataky de salmón con Martini, wasabi, vodka (perfecto); Soft shell crab con brandada de bacalao con Bloody Marie (intenso y crujiente); Croqueta de queso de cabra con un Margarita de higo y uva (todos repetirán el cóctel... una delicia); Huevos souflé con Champagne gin & lemon (otro cóctel que creará adeptos); Rissoto con chuletita de conejo y una mezcla de vino tinto, oporto y fresas en caliente (arriesgado, rompedor.... Prohibido probar el cóctel antes que el arroz, no se entendería); Minihamburgues con Martini Barbacoa (maridaje ideal, un 10); Arroz leche de coco y mango con un Apasionado Gin & Fruta de la pasión y Chocolate con chocolate y más chocolate para terminar....

Los precios están en torno a 3,5 € la tapa y 12 € el cóctel. Se pueden pedir por separado o con diferentes tipo de bebidas... Pero lo más recomendable: Pedir un degustación de 5 tapas y 5 cócteles por el precio de 35 €...

Un lujo de oferta en un espacio de lujo... Todos los que me acompañaron esa noche lo disfrutaron tanto como yo...

La pega: Puede tener tanto éxito que cuando queramos volver a ir a lo mejor está lleno. Mejor reservar.... 911260333 - 600981932/958

miércoles, 12 de mayo de 2010

BRISTOL BAR, BAR BRISTOL, ES LO MISMO, ES GENIAL


Son ya varias las veces que me he pasado por la calle Almirante y me he tomado un Gin Tonic en el Bar Bristol, especialmente después de visitar a mi amigo Karim en su Café Oliver (prometo hablaros de él muy pronto, porque me encanta)... Un bar inspirado descaradamente en una decoración brittish, con cabina de teléfono incluída. El sitio estaba bien, ambiente ejecutivo desenfadado (propio de las horas after work), y una carta de ginebras para perderte en ella (y para perderte luego en la calle si te pasas de tragos). Luego conocí a Ellie Baker, una de las partes propietarias de la idea y del local, y me cayó bien, tanto como para querer hacer un reportaje sobre el lugar. Finalmente me decidí a ir a comer, seducida por los maridajes o armonías (con tanta fobia a estas palabras por parte de los que se dicen ilustrados gastronómicos una ya no sabe que poner), entre platos y gin tonics. Son muchos los platos y muchos los gin tonics, así que os planto la carta enterita ahí arriba y así os los aprendéis. La verdad es que al final no comimos nada de esa carta sino una ensalada muy rica y unos abundantes quesos ingleses (cheddar, stilton y un tipo cammembert que no sé muy bien qué pintaba allí) con unas uvas dulces, nueces, y una compota agridulce de zanahoria (para mi colega comensal, Alexandra) o piña ( en opinión de una servidora), luego unas salchichas con puré de patata y cebolla caramelizada, vale; y un ragout de carne con champiñones y hojaldre, que también vale. Terminamos con un pedazo de tarta de queso con lima y galleta de gengibre.... Junto con la ensalada y los quesos lo mejor... Y con el Gin Tonic de después aún mejor... De verdad, una merienda de tarta de queso, lima y gengibre con Gin Tonic (por favor, que sea Gintonize, especialmente creado para Bristol Bar, y fever tree), me parece que resulta ideal... Seamos 'in'.


Resumiendo.... Para comer está bien y es asequible... tienes un poco de todo... Pero para beberrrrr... Es el reino del gin tonic....


Ojo! No perdamos de vista otro Gin Tonic Fan Club, Barrio Alto (Humilladero,16). Pequeñito pero matón.

sábado, 8 de mayo de 2010

MARACAIBO, SOFISTICACIÓN GASTRONÓMICA EN TIERRA DE COCHINILLOS







Nos fuimos de viaje relámpago el viernes a mediodía hasta Segovia para visitar el restaurante de un buen amigo, lugar muy conocido y ahora modernizado gracias a su nueva decoración. El restaurante es Maracaibo (http://www.restaurantemaracaibo.com/), mi amigo es Oscar Hernández y la decoración se la tenemos que agradecer a Jesi, su guapa y siempre impecablemente arreglada mujer, la misma que cambió las playas catalanas por la hostelería de Segovia por amor.


Tras un intensivo subir y bajar de varios trenes para encontrar el único que tan sólo tardaba media hora en llegar a nuestro destino (punto negativo para la mala indicación en la estación de Chamartín), un grupito de plumillas gastronómicos y algún cocinillas nos encaminamos hasta la ciudad del cochinillo dispuestos a descubrir el nuevo Maracaibo. Montse, Alexandra, Antonio y Ángela, Susana, Mónica, Valentín y yo llegamos con lluvia y con hambre. Oscar nos recibió con su habitual cordialidad y simpatía, nos acompañó hasta la mesa y nos compuso un menú delicado y basado en los productos castellanos de extrema calidad. Boquerón marinado y enterrado en polvo un queso muy parecido al Parmesano pero de origen castellano-leonés y aceite de Canena (no sé qué me gustaba más, si el aceite o la botella.... ¡quééééé bonita!!!; Carpaccio de boogavante con helado de salmorejo (un plato habitual donde el sabor del helado resulta impresionante); Fondo de caldo de pescado con almeja y berberechos; Tagliatelle de espárrago blanco con perrechicos y crema fina de patata; Salteado de setas con huevo con foie y trufa negra segoviana (otro clásico en la cocina de Oscar con una puntación 10); Congrio con sopa castellana y un Canelón de pollo de corral en salsa pepitoria (gran plato); Quesos variados locales y una Crema de yogur con gelatina de Moscatel y helado de Tempranillo. Henri Abelé, Gosset Rosado, y el próximo tinto que Oscar sacará al mercado, resultado de su nueva bodega.




Un lujo de restaurante cuyo pecado parece haber sido nacer en Segovia, tierra de cochinillos. Sin embargo merece la pena desplazarse hasta allí para disfrutar de este homenaje culinario. ¡qué está sólo a media hora de Madrid en tren!, ¡que si se conduce no se puede disfrutar del champancín!.




Y si no, que se venga Oscar a Madrid... Daría grandes lecciones a más de uno.




Gracias Oscar, por ser un anfitrión ideal, gracias por la gran pasión que demuestras por tu cocina, y gracias por mostrarnos tanto conocimiento sobre la cultura gastronómica y de producto de tu tierra.




Mónica muy callada, Angela muy guapa y Montse siempre provocando la sonrisa en los demás. Desde aquí solicito su receta de bacalo en cinco minutos...












domingo, 2 de mayo de 2010

RODRIGO DE LA CALLE, UNA MARCADA DIFERENCIA



"La naturaleza vegetal es el pilar más importante de nuestra cocina. Respetamos el producto , aceptamos su temporalidad y evanescencia. Nos dejamos llevar por los ciclos de la vida marcada por el reloj de las estaciones y así obtenemos de ellos su máxima expresión". Esta es la frase escrita con la que me recibieron el otro día en la mesa de uno de los restaurantes más revolucionarios de la actualidad. Si alguno de los lectores se preocupa por estar al día en materia de nuevos descubrimientos sociales culinarios habrá adivinado que el escrito pertenece al restaurante De La Calle de Aranjuez.


A mediodía salimos mi amiga Marita y yo de Madrid y en apenas algo más de media hora nos encontrábamos en puertas de Aranjuez. Estábamos deseando probar la cocina de aquel del que tanto habíamos leído y del que tanto habíamos escrito. En la Antigua Carretera de Andalucía nº 85, se encuentra el restaurante de Rodrigo de la Calle, donde accedemos a una planta con función de gastrobar (ya saben, lugar donde comer de manera informal platos elaborados habitualmente por cocineros de estrella Michelín a precios, dicen, populares... O lo que es lo mismo, un bar de tapas de toda la vida donde en lugar de comer callos con vino de Valdepeñas tomas ostras con Moët & Chandon).


Nos recibió Cristina, prima y jefa de sala de Rodrigo, simpática al principio, luego encima nos sorprendió con un manejo de la sala y unos conocimientos que merecen mis felicitaciones, muchos querrían a una Cristina en su sala. Bajamos al pequeño restaurante de la planta inferior y tomamos un menú basado en la gastrobotánica (investigación de nuevas especies y rescate de otras olvidadas en el reino vegetal así como el estudio de otros componentes para su uso en cocina -tallos, hojas, raíces...-). El menú fue iniciado con una Ostra cítrica, con manzana verde y apio, uno de sus platos emblemáticos que recicla cada temporada; Un Popurrí de verduras al dente con fondo de crema fina de patata agua de pimientos asados y yema de huevo (de gallina conocida), se acaban convirtiendo en un consomé de textura cremosa y punto dulce en boca; Puntas de espárrago blanco con vegetales y espardeña con un sabor potencial a verdura, algo poco usual de encontrar hoy por hoy; Arroz del desierto, con anémona... con un punto socarrat y sabor marino intenso que se ha convertido también en un clásico de Rodrigo (junto a la Ostra cítrica es quizás uno de los platos que nadie debería dejar de probar en su restaurante); Mero envuelto en cidra (hoja del que dice es la primera variedad de limón existente en la naturaleza; y Rabito de cerdo, meloso y siempre aligerado por el mundo vegetal. De postre la Diversidad Cítrica, diferentes sabores cítricos que muestran un espectáculo de sabor bárbaro, y una Torrija de Brioche servida con su propia leche, de las mejores que he comido nunca, no sé si desbanca a la que tomé hace unos meses en el Bodegón de Alejandro (San Sebastían), pero anda ahí, ahí.


Cristina nos sirvió tres vinos. Un Tierra Buena de Rueda (Sauvignon Blanc, Verdejo y Viura), rico e intenso; un rosado de La Mancha Tempranillo, que resultaba demasiado sútil tras la intensidad del blanco vallisoletano, y un tinto de Calatayud, Garnacha de Fuego, que estaba fráncamente bueno, un descubrimiento. Para cerrar, Rodrígo se sentó a la mesa con nosotras y nos preparó su Gin Tónic, previamente macerado y hervido en especias, lo que le otorga un sabor más suave y una graduación algo más amable.


A partir de aquí no le quitaremos ojo.... Rodrígo prepara sorpresas...
Muchas gracias a Rodrigo y a Cristina por su trato cercano y cordial