Foto: Jeff Mitchum
Las Vegas es uno de los destinos favoritos del público español, no necesariamente porque el viajante busque esta ciudad como destino, sino porque pilla relativamente de paso entre Los Ángeles y San Francisco, y se adapta perfectamente a los planes de un paquete turístico. Pero una vez aterrizamos en esta ya no tan pequeña ciudad, ¿cómo debemos movernos?
Transporte. Olvídense del
transporte público en Las Vegas. Aunque existen autobuses, su frecuencia es irregular y el trayecto
cuesta dos dólares, de manera que es aconsejable tomar un taxi. También pueden
contratar una limusina para trasladarse desde aeropuerto hasta el hotel,
disfrutar de un romántico tour para recién casados o celebrar una despedida de
soltero con música, champagne y todo tipo de facilidades para pasar una noche
inolvidable y confirmar que “lo que pasa en Las Vegas, se queda en Las Vegas”. Precio: A partir de 75$ (60€) la hora, más un
20% de propina.
City Tour. Para conocer el corazón de Las Vegas hay que recorrer sus
hoteles. La inmensidad de sus interiores temáticos y la historia reciente que
les envuelve representan la esencia de la ciudad. Si no quieren perderse ningún
detalle y viajar por todos los rincones de París, New York, Venecia, Egipto o
la Antigua Roma, lo más aconsejable es contratar los servicios de una agencia que
organice tours de ciudad con guía.
Outlets. Donna Karan, Calvin
Klein, Guess, Ralph Lauren, Levi´s, Nike y decenas de marcas americanas se
encuentran disponibles en los dos Premium
Outlets situados en los límites de la ciudad de Las Vegas. Merece la pena
perder una mañana entera recorriendo sus increíbles ofertas, que rondan en algunos casos la
tercera parte de su precio en España.
Propina. No lo duden, la
propina es su tarjeta de presentación en los Estados Unidos, y en Las Vegas más
aún. Amontone en su cartera billetes de un dólar para premiar a los chófers,
botones, aparcacoches, camareros, recepcionistas, acomodadores y a todo aquel
que le ofrezca cualquier servicio en su camino. Le harán la vida más fácil,
pueden estar seguros. En los restaurantes lo habitual es dejar entre un 12 y un
15 por ciento de la factura.
Happy
Hour. Las bebidas alcohólicas son consideradas un lujo; los
impuestos a los que se ven sometidos los establecimientos provocan una subida
en los precios considerable. Afortunadamente, las crisis ha puesto de moda la
franja happy hour, durante la que podemos pedir comida y bebida por la mitad de
precio en los locales más sofisticados.
Las
Fuentes del Bellagio. Continúa siendo uno de los espectáculos más bellos de Las
Vegas, y además es gratuito. Cada media hora a partir del mediodía y cada
quince minutos desde las seis de la tarde, las fuentes del lago del Hotel Bellagio danzan al ritmo de las
voces de Elvis, Celine Dion, Andrea Bocelli, Liza Minelli, etc.
*La ciudad de Las Vegas pertenece al estado de Nevada y hace
frontera con California, Arizona, Utah, Idaho y Oregón. En ella residen más de 2
millones de personas y su clima es extremo durante los meses de verano y de
invierno. No existe vuelo directo desde España.
De
interés:
Dormir: Las Vegas Boulevard
cuenta con los mejores y más caros hoteles de la ciudad, pero una oferta más
barata e incluso la posibilidad de alquilar un apartamento por semanas es
posible en los alrededores del aeropuerto y en las calles que bordean el Strip.
Comer: La oferta es de lo
más variada, desde los sofisticados restaurantes con menú degustación a partir
de los 250 dólares sin bebida; hasta los buffets ‘all you can eat’ por 11
dólares.
Visitar: Pueden alquilar un
coche en el aeropuerto y visitar la ciudad de cabo a rabo, aunque lo más
recomendable es contratar los servicios de alguna agencia que les muestre lo
más interesante de fuera y dentro del Strip.
*Para más información: www.las-vegas.world-guides.com