VILLA PADIERNA VOL.II

Recepción del Balneario Carratraca

Tras una sobredosis de champagne, el cuerpo a veces exige una depuración intensiva. Como mi voluntad es como una cabra y siempre tira al monte, necesito de cuidados externos que dobleguen mi voluntan y me meten en vereda.




Pues bien, tras mi sobredosis champanera en Villa Padierna Vol.I, me dirigí a Carratraca, donde se encuentra Villa Padierna Carratraca (Vol.II). ¿Ha que el nombre suena raro e incluso a carretilla coja pero os recuerda a algo? Claro, es que es donde están las famosas Termas de Carratraca. Pues bien, alojados en este hotel 'five stars' de aromas un tanto desagradables, provocados por el azufre del agua termal (acabas acostumbrándote eh?) pudimos disfrutar-sufrir de unos tratamientos intensivos a golpe de agua como el baño turco (agradable), vapor a chorro para las vias respiratorias (desagradable), hidromasaje en bañera individual (agradable), ducha con chorro a presión con varias temperaturas a base de manguerazo-(una sensación intensa pero agradable, quisimos repetir), piscinas frías, piscinas calientes, piscinas heladas (adsgrdesables, pues que no estoy segura). Y finalmente, una gran masaje (agradable, agradable, agradable). El resultado es un olor apestoso al principio y una piel de terciopelo después... Aguas milagrosas para el organismo interno y el aspecto externo, no en vano llegan clientes desde todos los puntos del mundo para beneficiarse de sus propiedades.





El restaurante es manejado por el jovencísimo cocinero Victor Fernández, y cuenta con la asesoría de un grupo de nutricionistas médicos, ya que la dieta es estricta, con técnicas de envasado al vacío para reducir al máximo las calorías mientras se inyecta jugosidad al producto; gelatinas; endulzante de maíz... Nada de vino ni de cerveza de momento.. Y por supuesto, ni soñar con el champancín. Pecado y gordo. Buena fórmula, pero de momento puedo vivir si ella. (Me estoy acordando de Teo... Muchas gracias, jeje)





Ah! Tengo que decir que el balneario se aleja infinito de los habituales SPA de hotel... Sus instalaciones son auténticas, dando la sensación de retroceder 60 años atrás... Cómo si entrases en un balneario de la época de Agatha Christie... Apasionante de verdad... Existiendo un enorme contraste con las habitaciones del hotel... Que tiene cabeceras de piel de leopardo y luces moradas y azules a lo femme fatal...





Y antes del regreso un saltito a Casa Pepa, también en Carratraca... para viajar ligeritos... Cocido de verduras, Callos con garbanzos, manitas y morcilla; Huevos con chorizo frito; Albóndigas con patatas fritas; Cordero guisado con menta; Helado; Flan (pero sin nata eh?), y muuuucho tinto de verano. Precio total: 8 € por persona.... Ojo, el restauante es la casa de Pepa de verdad... Con sus recuerdos de Benidorm y las fotos de la boda de sus padres...





Nota very important: Este hotel, que firma con el nombre del anterior, es de un estilo completamente diferente. Ambos son propiedad de Ricardo Arranz, y por eso reciben el nombre de Villa Padierna, pero la gestión de cada uno es independiente.